La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (Fiab) y la Asociación Nacional Grandes de Empresas de Distribución (Anged) han ratificado su compromiso, junto al Ministerio de Sanidad, para la reducción de azúcares añadidos, sal y grasas saturadas, que alcanza a más de 3500 productos que en el promedio de la cesta de la compra aportan el 44.5 % de la energía total diaria. Todo ello en el marco del Plan de Colaboración para la Mejora de la Composición de los Alimentos y Bebidas y Otras Medidas (2017-2020).
En todo caso, Fiab recuerda que no todos los productos pueden ser reformulados por cuestiones tecnológicas, legales, de seguridad alimentaria, así como por los condicionantes en cuanto a sus propias características y propiedades organolépticas.
Así pues, dada la actual preocupación acerca de los malos hábitos y el riesgo que esto conlleva para nuestra salud repercutiendo negativamente en nuestra vida diaria, se ha establecido una reformulación de alimentos y bebidas para la disminución de azúcares, sal y grasas saturadas con el objetivo de lograr al máximo en un margen de dos años aproximadamente dicha reducción.
Tanto el consumidor como el fabricante y vendedor o distribuidor está interesado y se ve totalmente involucrado en esta reformulación atendiendo a diferentes aspectos.
El consumidor quiere tener a su alcance productos que satisfagan sus necesidades y que además de aportarle todos los nutrientes y energía que su cuerpo necesita, lo haga de manera equilibrada y sana sin perjudicar bajo ningún concepto su salud.
Por otro lado, el fabricante y vendedor o distribuidor, tienen la necesidad de hacer las cosas bien. Además le interesará asegurarse de que sus ventas no decrezcan por el motivo de vender alimentos o productos considerados como no saludables.
Los cambios en las reformulaciones afectarán a 13 grupos de alimentos y bebidas los cuales se consumen con mucha frecuencia y que la mayoría de personas incluye en su compra diaria:
- Platos preparados
- Aperitivos salados
- Bebidas refrescantes
- Helados
- Galletas
- Productos lácteos
- Cremas
- Salsas
- Derivados cárnicos
- Bollería y pastelería
- Cereales
- Néctares de fruta
- Pan especial envasado
Todos estos, son productos los cuales está previsto que cambien su formulación de tal forma que empiecen a ser mejor vistos por los consumidores y dejen de ser catalogados como productos poco sanos o «basura».
Lo que queremos con esto es dar un impulso hacia la dieta saludable y aportar a la sociedad un enfoque más amplio de esta, promocionando una dieta variada y equilibrada, la práctica de actividad física regular y por último estilos y hábitos de vida saludables desde la infancia.